Un estudio llevado a cabo por investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill (EE.UU.) muestra que la técnica denominada ‘estimulación transcraneal de corriente alterna’ podría ayudarnos a fortalecer aún más este proceso de memorización.
Concretamente, el estudio, publicado en la revista «Current Biology», muestra que la estimulación transcraneal de corriente alterna mejora el almacenamiento y consolidación de recuerdos durante el sueño, lo que podría utilizarse para ayudar a aquellas personas que, como consecuencia de una enfermedad neurológica –caso, entre otras, del alzhéimer–, sufren un deterioro en su capacidad de memorización.
Para llevar a cabo el estudio, de tan solo dos días de duración, los autores contaron con la participación de 16 varones adultos que tuvieron que realizar sendos ejercicios de memoria –uno de memoria asociativa y otro de memoria motora– antes de irse a dormir. Así, y una vez alcanzaron el sueño en la primera noche de estudio, los participantes fueron sometidos a estimulación transcraneal de corriente alterna, esto es, a una corriente alterna de baja intensidad sincronizada con sus uusos de sueño y administrada a través de electrodos situados en áreas específicas de sus cueros cabelludos. Por el contrario, y ya en la segunda noche, los autores volvieron a colocar los electrodos en todos los participantes, pero no administraron ninguna corriente –estimulación ‘placebo’.
Una vez concluido el período de sueño, los participantes se sometieron a los mismos ejercicios de memoria. Y de acuerdo con los resultados, las puntuaciones obtenidas en los ejercicios de memoria motora fueron significativamente mejores tras la noche en la que recibieron la estimulación transcraneal de corriente alterna. No así en el caso de la memoria asociativa, en los que las puntuaciones resultaron muy similares con independencia de que hubieran recibido una estimulación ‘real’ o ‘ficticia’ –placebo.
Los resultados demostraron la existencia de una relación causal entre los patrones de actividad eléctrica de los usos del sueño y el proceso de consolidación de la memoria motora.
Fuente: El Cisne